- datos científicos sobre la leucemia y sus tratamientos
- estadísticas sobre las personas con LMC
- información práctica sobre derechos y responsabilidades
- datos personales sobre su calendario de citas y su equipo sanitario
- resultados de las pruebas y significado de términos como “respuesta citogenética”
Si se siente abrumado por toda esta información, procure tener en cuenta que nadie espera que lo asimile todo de inmediato. Si en algún momento tiene dudas, lo mejor es preguntar y saber con seguridad antes que quedarse preocupado. Los profesionales sanitarios prefieren saber si hay algo que le preocupa, ya que podrían ayudarle.
Muchas personas también sienten ansiedad cuando están en un hospital o en la consulta del médico, sin importar cuánto tiempo hayan tenido una afección concreta. Y cuando estamos ansiosos, la comunicación puede sufrir. Por eso hemos elaborado algunas ideas sobre cómo aprovechar al máximo las citas médicas y salir de ellas sintiéndose más informado.
Pensar con antelación
Preparar aquello de lo que desea hablar en una cita puede ser útil. Aquí, en CML Life, tenemos una guía para las citas [vínculo a https://www.cml-life.com/images/appointmentguide.pdf], que puede servir de ayuda para preparar las preguntas que pueda tener antes de reunirse con el médico.
También puede establecer un objetivo para cada cita, que podría ser algo así:
“Cuando termine esta cita quiero…
- …haber comprendido los resultados de mis últimas pruebas”
- …tener algunos consejos prácticos para controlar la fatiga y las náuseas”
- …haber comprendido para qué es mi medicación actual y cómo funciona”
Tener un objetivo para la cita puede ayudar a mantener la conversación en el buen camino y hacer que sea más útil para usted.
Venga equipado
Lleve a un amigo: si hay un amigo o un miembro de la familia que pueda acompañarle a una cita, sería muy útil tener otro par de ojos y oídos en la sala con usted. Su amigo podría tomar notas por usted, lo que le permitirá concentrarse en lo que le dice el profesional sanitario. También puede ser útil hablar después de ello con su amigo, para comprobar que lo que ha entendido de lo sucedido coincide con la opinión de su amigo.
Lleve papel y bolígrafo: puede que le resulte útil anotar cosas que, de otro modo, olvidaría. Asimismo, puede pedir a su médico o enfermero que escriba los términos técnicos que está usando para que pueda consultarlos más adelante. Como alternativa, puede utilizar la grabadora de voz de su teléfono para grabar la conversación, ya que no siempre se puede confiar en la memoria.
Muéstrese seguro
Independientemente de la cualificación y la experiencia que pueda tener su equipo sanitario, USTED es el experto en su propia salud, bienestar y vida. Sea claro sobre lo que más le importa y recuerde que nadie puede tomar decisiones sobre usted sin su opinión o consentimiento.
Haga preguntas abiertas
Hacer preguntas abiertas puede encauzar una conversación, lo que sería más difícil de hacer con respuestas de tipo sí/no. A continuación, a la izquierda, hay algunos ejemplos de preguntas “cerradas” (respuestas breves y exactas); a la derecha hay ideas para hacer preguntas más abiertas:
| Ejemplo de pregunta cerrada | La misma pregunta, pero abierta |
| ¿Necesitaré análisis de sangre regulares? | ¿Qué análisis me harán, con qué frecuencia los tendré y por qué? |
| ¿Cuándo obtendré los resultados de esta prueba? | ¿Quién revisará conmigo los resultados de las pruebas y me los explicará? ¿Cuándo ocurrirá esto? |
| ¿Este medicamento tiene efectos secundarios? | ¿Qué tipo de efectos secundarios podría tener con este medicamento y con quién debo ponerme en contacto si no puedo manejarlos? |
| ¿Puedo seguir trabajando? | ¿Qué tipo de efecto podría tener esto en mi vida laboral? Mi trabajo es ……… y es importante que pueda.……. |
| ¿Existe una cura para la LMC? | ¿Qué podemos hacer para controlar mi LMC a largo plazo? ¿Cuáles son las opciones en cuanto a una cura para la LMC? |
| ¿Necesito venir a verle con regularidad? | ¿Cuál es el plan para controlar mi salud a largo plazo? ¿Con qué frecuencia vendré a verle? |
Esté completamente seguro de lo que se está diciendo
A nadie le gusta sentirse confuso o perder el hilo de una conversación. Si esto sucede, no tema parar y hacer preguntas para asegurarse de que lo comprende. ¿Se le podría explicar de otra manera? Antes de irse, puede repetir con sus propias palabras lo que ha entendido de la conversación, para que el médico o enfermero pueda explicar mejor los detalles o cualquier cosa que se le haya olvidado.
Diga todo lo que quiera decir
Si algo le molesta, vale la pena informar a su médico o enfermero sobre ello. No se lo calle porque no parezca pertinente para la conversación, o porque usted no sepa cómo sacar el tema de lo que quiere decir. Incluso las cosas que usted pueda pensar que no están relacionadas con la LMC pueden ser pertinentes; su equipo sanitario podría advertir un efecto secundario o un síntoma nuevo de forma temprana, o podría dirigirle a un compañero que pueda ayudarle mejor que ellos.
Pida ayuda
A veces todos necesitamos un poco de ayuda con algo, ya sea para ser escuchado amablemente o recibir consejo médico o ayuda práctica. Si necesita la experiencia ajena o una mano amiga, pregunte a su equipo sanitario si conoce algún servicio de ayuda o apoyo en su zona.
Siguientes pasos
Antes de abandonar la consulta del médico o enfermero, podría ser buena idea acordar con ellos lo que sucederá a continuación. De esa forma, todos tendrán claro lo que va a pasar y lo que cada uno de ustedes debe hacer, si hay que hacer algo, antes de la próxima cita. Puede ser parte de la ayuda para sentirse empoderado y parte de su propio plan de tratamiento.
Recuerde que, en cualquier momento, siempre podrá evaluar la confianza que tiene en la gestión de su salud con nuestro Cuestionario sobre la confianza sanitaria. [https://www.cml-life.com/hlq/your-health-literacy/]